Querida mamá:
El motivo por el cual te escribo, es
porque llevas ocho meses en coma y en ese tiempo han pasado muchas cosas y hoy
te las quiero contar. Todo empezó cuando tú, por razones del destino, me vistes
involucrado en una manifestación que iba en contra de todos tus ideales y, en
ese preciso instante al verme allí, te caíste al suelo y te quedaste
inconsciente por mi culpa, mamá lo siento muchísimo me siento culpable de tu
estado, por eso hoy te contaré todo desde cero.
Me imagino que al ver el tamaño de
la carta iras a la nevera a coger algo de beber ya que, estarás un largo tiempo
leyéndola y necesitarás algo para calmar tu sed ahí notaras el primer cambio.
Como ves, en la nevera no está tu querida Vita
Cola sino otro llamado Coca-cola. Si te hubieras despertado antes, seguiría
ahí pero mamá te has perdido mucho…
Te has perdido una guerra que nunca
llegó a desencadenarse, una guerra que dividió a Berlín. Los Estados Unidos y
la Unión Soviética estaban enfrentados desde después de la Segunda Guerra
Mundial y llevaban años intentando imponer su ideología. Intentaron
imponerla en Corea del Norte, presidida por Kim II Sung, cuando
intentó anexionarse Corea del Sur y, luego, con la invasión soviética a Hungría (1956) y, después, con la revolución cubana,
liderada por Fidel Castro y el Che Guevara. Pero esto no fue lo
peor, las tensiones aumentaron aún más con la visita de Kennedy a
Berlín, debido a la construcción del muro de Berlín por culpa de la URSS,
porque, mamá, ellos no querían que huyéramos a Berlín occidental para mejorar
nuestra calidad de vida, aunque yo se que tú te hubieras quedado. Bueno, pero
eso no es todo la URSS también tuvo sus triunfos al igual que Estados Unidos, como
en la Guerra de Vietnam, en
la que ganamos a Estados Unidos. Por ese tiempo Breznev era el
que dirigía la Unión Soviética, y fue el momento de mayor expansión para el
comunismo. Después de la
victoria en Vietnam vino la invasión de Checoeslovaquia(1968) y, después,
la invasión de Afganistán, que tuvo sus consecuencias en las Olimpiadas de 1980, en las que se
negaron a participar, ambos rivales. La
verdad que no te perdistes nada mamá, fueron unas Olimpiadas horribles. Ya
estaba terminando la Guerra Fría, pero esos últimos años fueron los más
difíciles porque Gorbachov, nuestro presidente en esa época, no puso
poner freno a la desaparición del comunismo soviético y Reagan, el
presidente de Estados Unidos en ese tiempo, también, se mantuvo firme.
Finalmente la Guerra Fría acabó con la caída del muro de Berlín. Sé que no era
lo que tu deseabas en tus ideales pero fue así.
Cuando
tú estabas en coma, no solo se enfrentaron de forma militar si no que el
enfrentamiento entre las dos Alemanias fue más allá. Hubo una gran carrera
armamentística en la que había una gran cantidad de euromisiles y de misiles balísticos
intercontinentales todos pasamos mucho miedo pensando que se podría
desencadenar una Tercera Guerra Mundial, ¿sabes lo que hubiera sucedido? Que el
mundo no hubiera existido y que a día de hoy no te podría contar esto, pero
bueno por suerte no paso y estoy aquí para contártelo. También hubo un gran
choque entre los dos bloques con la NASA
porque nosotros fuimos los primeros en mandar a un hombre al espacio, Yuri Gagari, gracias al programa
espacial Soyuz y su vehículo de lanzamiento
pero, en cambio, ellos consiguieron enviar al primer hombre que piso La Luna.
Mamá,
éramos tan diferentes pero tan distintos que no teníamos ni en común al
presidente, y eso que realmente todos éramos iguales y vivíamos en el mismo
sitio, pero claro separados por un muro. Por un lado nuestra Berlín Oriental
con Walter Ulbricht al mando, y
líder del Partido Socialista Unificado
de nuestra Alemania y por otro lado la Berlín Occidental con Konrad Adenauer al mando de la Republica
Federal Alemana. Como vez estábamos enfrentados en todo.
Tú no
te acordaras de cómo vivíamos en ese tiempo pero nuestra economía estaba
controlada por el Estado todo era controlado por este, hasta tu enviabas cartas
de recomendación de los productos y también te dedicaste a colaborar con los pioneros con los que realizabas
grupos de cantos. Y solo teníamos un único coche el Trabant. Después del 40
aniversario de la fundación de la RDA cae el muro de Berlin, y en ese
tiempo Erich Honecker estaba al
mando, ese momento fue muy feliz para todo el mundo pero yo me acuerdo de esas personas que murieron en el intento de superar la dura vigilancia
de los guardias fronterizos de la RDA.
A lo mejor nuestra
vida en la Alemania que vivimos no era la mejor pero bueno ahora como estamos
tampoco es perfecto. Porque aunque ahora podemos tener todo, ¿de qué nos sirve?
Si mucha gente está sin trabajo por culpa de este cambio tan grande. Mamá,
ahora empiezo a entenderte un poco más, porque aunque cuando éramos niños no
tuviéramos todo lo que queríamos no nos preocupábamos por conseguir un trabajo
o no, y ahora nuestro país esta así. Pero mirándolo por el lado positivo
gracias a todo esto nos volvimos a reencontrar con papá y ¿sabes qué? Tengo dos
hermanos a los que también les encanta Sigmund Jahn. Bueno ya los conocerás…
Mamá te quiero dar las gracias por darnos a mí y a mi hermana todo lo que has
podido y más y también por enseñarnos esos ideales. No te preocupes que dentro de poco recordaras
todo y podrás disfrutar de todos nosotros aunque no sea en la Alemania que tú
querías.
Te quiere, tu hijo Alex.
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